En el marco del plan de trabajo aprobado por el Consejo Directivo de la Academia Judicial, el Programa de Formación este año se dedicará durante el primer semestre a la implementación del Proctorio y ejecución de todo el proceso de selección y ejecución de sus versiones 78 (especial para abogados/as con experiencia), y los programas regulares 79 y 80; además de implementar los cambios del nuevo diseño curricular del programa que comenzará a implementarse a partir del PF 80.
Para conocer más en detalle los desafíos y novedades que tiene contemplado el Programa este año compartimos la entrevista realizada a la Coordinadora del Programa de Formación, Alejandra Mera.
ENTREVISTA
Alejandra Mera González-Ballesteros
Coordinadora del Programa de Formación
1. ¿Cómo valoraría la experiencia de impartir el Programa de Formación en línea que se realizó durante el 2020 por el contexto de pandemia?
La experiencia de modelar y ejecutar el Programa de Formación en línea fue muy desafiante y a la vez positiva. Durante la segunda semana de ejecución del curso tuvimos que derivar a la modalidad en línea, por lo mismo se requirió suspenderlo un tiempo para poder reformularlo. Por un lado, el orden en el cual se impartían los cursos y las pasantías programadas requirió gestionar con todos los equipos docentes su disponibilidad y flexibilidad para modificar fechas. En ese sentido, contamos 100% con su apoyo.
Paralelamente, debíamos construir syllabus distintos para poder adaptar los cursos a la modalidad en línea y no reproducir el mismo número de horas y optar solamente por reproducirlo frente a una pantalla. Se produjeron materiales con videos explicativos, se diseñaron guías de preguntas y pautas de ejercicios de resoluciones de casos.
Puntualmente respecto a las clases sincrónicas, por regla general los/as profesores/as cumplieron con hacer clases distintas, más activas, recogiendo e incorporando los elementos que habían trabajado por su cuenta; fueron cursos que en su mayoría logramos convertir desde la lógica de la clase tradicional a una modalidad de clase inversa, que es un objetivo de largo plazo y pudimos hacerlo rápido y con un alto nivel de compromiso del equipo docente y de la Academia. Un aspecto que consideramos que fue relevante y valorado por los/as alumnos/as es que como equipo participamos en todas las clases sincrónicas, para ir implementando ajustes adecuados y a tiempo.
A nivel global quedamos muy satisfechos porque se logró realizar todas las actividades en línea, se incorporó por primera vez que hicieran el curso de Ley de Entrevistas Videograbadas, se desarrollaron modelos de pasantías y de Taller de Relación en Corte que cumplieron los objetivos en su totalidad.
2. ¿Cuáles serán las principales novedades y desafíos del Programa de Formación para 2021?
Hay tres grandes desafíos para este año. Primero, que se va a impartir por primera vez el Programa nº 78 para abogados/as con experiencia profesional, y eso significa tener un grupo con distintas características a las que generalmente tienen los estudiantes del Programa regular. Significará un desafío el ajustar los cursos, no solo por los tiempos más acotados sino por temas sustantivos para entregarle la formación esencial requerida a un grupo que tiene más experiencia.
Segundo, la implementación del nuevo curriculum recientemente reformulado, en el Programa de Formación 80. El programa no solamente incorporó una nueva malla sino que además se diseñó un perfil de ingreso y de egreso de los/as estudiantes del Programa; y metodologías con las que se va a implementar.
Finalmente, el tercer desafío es el formato en que haremos todas las actividades. Si se logra el nivel de seleccionados/as tendremos a fin de año tres programas de formación paralelamente, muy probablemente en línea para todo o partes de esos programas y sin duda buscaremos lograr la mejor calidad en este ambiente virtual.
3. En vista del contexto de pandemia actual ¿cuáles han sido los énfasis o lineamientos para diseñar un proceso en línea de preselección de los/as postulantes del PF 77 y 78 a realizarse durante febrero?
Inicialmente no fue sencillo tomar la decision de realizar un proceso de selección con estas características, no se cuenta en Chile con procesos de selección tan masivos de rendición de pruebas en línea, pero el formato en que se rendía la prueba y el número de postulantes, que en los últimos años ha sido en promedio 500, hacía imposible desarrollarlo de manera presencial.
El rendir la prueba en un formato en línea tiene varios desafíos. Uno, la necesidad de asegurar la identidad de la persona que lo rinde. Dos, contar con una plataforma que sea capaz de alojar esta prueba y de contar con nociones básicas de acceso. Tres, que contara con un sistema de monitoreo remoto que sea capaz de detectar conductas no acordes a la ética y a las instrucciones. Por lo tanto, hay una serie de elementos que el sistema tenía que contemplar, por ejemplo de cierre a otros tipos de páginas mientras se rinde la prueba.
El desafío global ha sido el diseño de todos los instrumentos e instructivos con estas características. También era crítico contar con la seguridad que todas las personas contaran con los equipos para rendirla y cuenten con conexión a internet permanente. Confíamos que con todas las medidas adecuadas que tenemos podremos contar con un proceso exitoso en ambas instancias organizadas para el 11 y 26 de febrero.
4. En pocas palabras ¿con qué tipo de formación se encontrarán los/as estudiantes que ingresen al Programa de Formación durante 2021?
Los/as estudiantes del Programa 78 y 79 se van a encontrar con una versión ajustada y corregida de lo hecho ya durante el 2020, en el caso que mantengamos el formato en línea. Es decir, con un programa adaptado a esta realidad por lo tanto con la seguridad que van a tener una formación completa. Quienes entren a fines de año al Programa 80, se van a encontrar con un programa totalmente reformulado, con cursos atingentes directamente a la función judicial; con cursos que también se relacionan con otras habilidades que se requieren como por ejemplo trabajo en equipo; con instancias de formación relacionada a la ética. Además de todos los cursos de prácticas y destrezas esenciales para la función judicial.
El programa contará con un énfasis muy prioritario a poder realmente impartir todas las clases en formato de clase invertida, para que los/as estudiantes tengan tiempo de preparar y reflexionar fuera del aula. Y que tanto virtual o presencial, el aula sea un espacio de profundización y reflexión, que signifique realmente que el contacto con cada profesor/a sea un aporte en la profundización de los conocimientos y habilidades. Esto será muy pionero, no solamente en la formación judicial sino en la formación legal. En general la educación jurídica todavía tiende a ser, lamentablemente, muy enfocada en la transmisión de conocimientos con un rol muy pasivo de los/as estudiantes. Nosotros estamos empeñados que eso cambie porque estamos ciertos que la experiencia activa de los/as estudiantes en su formación asegura de mejor manera que integren todos los conocimientos y habilidades que la Academia quiere transmitir.